Washington, (agencia Informativa de México).- En una declaración conjunta, los ministros de Relaciones Exteriores de Canadá, el Reino Unido y el Secretario de Estado de los Estados Unidos, anunciaron sanciones a altos cargos de la región autónoma china de Xinjiang, por el genocidio contra los musulmanes uigures y otras minorías en esa región occidental.

Trascendió que las acciones de los países son sobre seis altos cargos, todos ellos altos cargos del Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang y de la Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang.

“Estamos unidos en nuestra profunda y constante preocupación por las violaciones y los abusos de los derechos humanos cometidos por China en Xinjiang. Las pruebas, incluidas las de los propios documentos del gobierno chino, imágenes de satélite y testimonios de testigos presenciales, son abrumadoras”, señalaron en un comunicado de prensa de la Secretaría de Estado norteamericano.

Argumentaron que el extenso programa de represión de China incluye severas restricciones a las libertades religiosas, el uso de trabajo forzoso, detenciones masivas en campos de internamiento, esterilizaciones forzadas y la destrucción concertada del patrimonio uigur.

“Hemos tomado medidas coordinadas sobre medidas, en paralelo a las medidas de la Unión Europea, que envían un mensaje claro sobre las violaciones y abusos de los derechos humanos en Xinjiang”, señala el documento enviado a la prensa internacional.

“Estamos unidos para pedir a China que ponga fin a sus prácticas represivas contra los musulmanes uigures y miembros de otros grupos minoritarios étnicos y religiosos en Xinjiang, y que libere a los detenidos arbitrariamente”.

Además, subrayan, la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas y piden al gobierno de China que otorgue a la comunidad internacional, incluidos los investigadores independientes de las Naciones Unidas, periodistas y diplomáticos extranjeros, acceso sin obstáculos a Xinjiang.

“Continuaremos uniéndonos para destacar las violaciones de derechos humanos en China. Estamos unidos y pedimos justicia para los que sufren en Xinjiang”, concluye el documento.

El Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang es una institución político-militar que gobierna varios territorios y numerosas ciudades de Xinjiang, y que ha alcanzado acuerdos de colaboración económica con varias empresas chinas para construir y gestionar la masiva red de campos de detención y sistemas de cibercontrol de aproximadamente 25 millones de personas.