Cuernavaca, Mor. (Agencia Informativa de México).- La dirigencia estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), hizo un extrañamiento a su candidato a la alcaldía de Jiutepec, José Manuel Agüero Tovar para que evite contenidos vulgares o que vulneren la dignidad de las mujeres, luego de que en un nuevo video apareció bailando una canción de alto contenido misógino y agresivo contra el género femenino.

Matías Quiroz Medina, secretario general del PRD en Morelos, informó que se le ha pedido a Agüero Tovar, sea responsable con el contenido de sus contenidos en las diversas redes sociales, particularmente en Facebook y TikTok, las que recientemente ha utilizado para difundir videos que le han valido criticas y señalamientos.

José Manuel Agüero Tovar (Manolo Agüero) intenta regresar a la alcaldía de Jiutepec, por lo que ha logrado ser candidato de una alianza entre el PRI y el PRD, sin embargo, en su intento por ser empático con la sociedad ha difundido diversos videos sobreactuados que han provocado comentarios por su presunta vulgaridad. En el más reciente aparece bailando con una niña y dos hombres, una canción de reguetón justo cuando aparece la frase: “Loco… tu mujer una perra, una diabla, mira como me ladra”.

El video generó una reacción del Instituto de la Mujer de Morelos (IMMorelos), cuya titular Flor Desiree León emitió otro video donde sancionó la actitud del alcalde y recordó que videos como el de Agüero Tovar sólo perpetúan la violencia, sobre todo cuando provienen de ciudadanos que han tenido poder o posiciones de gobierno: “Detrás de acciones de violencia simbólica como esta derivan en feminicidios”, sentenció.

En entrevista el dirigente perredista reconoció que el video genera incomodidad, pero tampoco no aporta a una sociedad donde no se ha abatido el índice de feminicidios.

Por su parte, Agüero Tovar publicó un nuevo video donde se disculpa por lo publicado, pero justifica su publicación bajo la idea de que dicha canción en la plataforma TikTok tiene más de 60 millones de reproducciones, por lo que no representa –necesariamente- una ofensa para otras personas.