Reynosa, Tamaulipas. – Un menor de edad murió por intoxicación de medicamento en el Hospital General de Reynosa, a donde ingresó por una sobredosis que le administraron sus padres porque no dejaba de vomitar, informó en un reporte de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas.

El hecho fue reportado por parte de la trabajadora social en turno del Hospital General a la Policía Investigadora.

Al iniciar las investigaciones se entrevistaron con la pediatra en turno, la cual detalló que el fallecimiento del infante había sido por un paro cardiorrespiratorio y que había ingresado al hospital por deshidratación e intoxicación por una mala dosis de medicamento.

Por su parte, el padre del menor señaló que su menor hijo empezó con vomito la madrugada del domingo 01 de noviembre, por tal motivo le hablaron a la pediatra explicando la situación, esta les indicó que se fueran a urgencias, pero al no ver una mejoría en su hijo, decidieron llevarlo a otro pediatra.

Ahí les recetaron medicamento y decidieron que fuera tomado y le dieron la dosis recomendada, pero al no ver mejoría en el menor y ver que él pequeño vomitó el medicamento, decidieron volver a darle la dosis.

Sin ver mejoría, compraron el medicamento inyectado y fueron a la Clínica Miravalle donde la enfermera no le quiso aplicar el medicamento y le dijo que lo llevaran al Hospital General al área de urgencia.

Ahí les dijeron que el menor iba deshidratado, con probable presión cerebral debido a una válvula con la que tratan la hidrocefalia que padece el menor y una probable intoxicación por el medicamento recetado, pero más tarde les avisaron que había muerto.

De la muerte del infante dio fe el agente de la Unidad General de Investigación (UGI) y después fue llevado a una funeraria donde se le practicó la autopsia y fue entregado a sus deudos para la cristiana sepultura.

oal