Monterrey, NL., (Agencia Informativa de México).- La recuperación económica para México, luego de la pandemia, será más lenta que la de otros países debido al desaliento a la inversión extranjera y a la escasez de estímulos fiscales, advirtió Grupo Financiero Banorte.

Gabriel Casillas Olvera, director general de Análisis Económico del holding, dijo lo anterior al impartir la conferencia virtual Análisis y panorama de la economía mexicana, en la Universidad de Monterrey (UDEM).  

Estimó que habría cambios importantes en la economía del país no en la caída debido a las cuarentenas, sino a la hora de la recuperación.

El especialista citó como ejemplo a España, que en el segundo trimestre cayó más que México, pero, para el año que viene, “los optimistas esperamos 4 por ciento para México, mientras que, para España, la mayoría espera 7.5 u 8 por ciento” de avance económico.

“Hay una diferencia muy grande, sobre todo en la recuperación, qué tan vigorosa es”, indicó.

Sostuvo que “cuando no das un estímulo fiscal, esas empresas que no pudieron sobrevivir quiebran y se acabó”.

“En cambio”, expuso, “en los países en los que hubo esos estímulos fiscales, sobreviven una gran mayoría y la economía al unísono crece y hay más empleo”.

En su conferencia, el Doctor en Economía por la Universidad de Texas A&M habló sobre el impacto económico y financiero de la contingencia sanitaria por

Aseguró que Covid-19 en México ha provocado “la peor recesión desde 1932” y las repercusiones en el país por el resultado del proceso electoral en Estados Unidos. 

Casillas Olvera afirmó que falta confianza para la reactivación económica debido a casos como las consultas ciudadanas para suspender obras como el Metrobús de Torreón, la planta de fertilizantes de Sinaloa o la cervecería de Mexicali.  

“El momento para invertir está en sus niveles más bajos, en los últimos años, se han cancelado inversiones como la de Iberdrola o de Tesla, salimos de la lista de 25 países más atractivos para inversión extranjera del Índice Kearney”, señaló.

Comentó que, en cada recesión que vivió México en el pasado –incluida la de 2009–, siempre hubo una reforma para subir impuestos y, en esta ocasión, no la ha habido.

Casillas Olvera enfatizó que continúa preocupando el empleo, ya que se perdieron 700 mil plazas formales y será difícil recuperarlas, tal vez en dos o tres años más, además de los empleos informales.