Monterrey, NL., (Agencia Informativa de México). - Durante el segundo trimestre, los indicadores económicos en todas las entidades federativas del país se colapsaron respecto al trimestre previo, por el severo golpe de la pandemia, reveló hoy el INEGI. 

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) para el lapso abril-junio de 2020.

Destacó que las caídas más significativas se observaron en: Quintana Roo, Baja California Sur, Puebla, Nayarit, Guanajuato, Morelos, Zacatecas, Guerrero, Querétaro, Coahuila de Zaragoza, San Luis Potosí, Aguascalientes y Nuevo León. 

En Baja California Sur, por ejemplo, el desplome fue de 37.9 por ciento, mientras que en Quintana Roo la caída fue de 38.2 por ciento, en Puebla la baja de 27.8   y en Coahuila el retroceso fue de 20. 4 por ciento.

En su comparación anual, dijo los estados que reportaron las mayores reducciones en su actividad económica fueron: Baja California Sur, Quintana Roo, Puebla, Coahuila de Zaragoza, Morelos, Aguascalientes, Nayarit y Querétaro, en el segundo trimestre.

Refirió que, a la tasa anualizada, en Baja California el saldo negativo fue de 42.5 por ciento; en Quintana Roo de 40.6 por ciento y en Puebla de 29.4 por ciento.

Los analistas financieros han estimado que hacia el cierre del presente año la economía mexicana podría hundirse hasta un 12 por ciento.

Por su parte, Banco de México (Banxico) advirtió recientemente que debido al brutal embate de la pandemia durante 2020, la recuperación económica del país será difícil y prolongada,  y podría tardar hasta una década.

También anticipó, de manera reiterada, una contracción de la economía interna de 10 por ciento hacia el cierre de este año.

Subrayó que “la magnitud de la recuperación en los próximos meses es fundamental para determinar cuánto tiempo tomará regresar al nivel de actividad
observado en el tercer trimestre de 2018 para así dejar atrás la fase de recuperación e iniciar una de expansión”. 

El banco central estimó que “la etapa de la recuperación podría durar de dos a seis años, o incluso hasta una década si se considera el producto interno (PIB) per cápita”.