Nuevo Laredo, Tamaulipas. - El regidor presidente de la Comisión de Salud, Jorge Ramírez Rubio, indicó que si bien han disminuido los casos positivos de COVID-19 en Nuevo Laredo, preocupa la posibilidad de que aumente el dengue.

“Se ha disminuido el índice de mortalidad, pero todavía es necesario apretar muchísimo más, porque, aunque somos de las ciudades que menos está creciendo en COVID, ha sido gracias a las medidas que se han ido instituyendo”, dijo.

Y es que comentó que con las recientes lluvias aunadas al calor, propician la propagación del mosquito transmisor del dengue.

“Se tienen ahorita 33 casos probables de dengue, las aguas que tuvimos hace días han provocado la proliferación del mosquito, y con esto tenemos a la vuelta de la esquina la posibilidad de un brote”, explicó.

El médico comentó que ya se tiene la experiencia del dengue, e indicó que el mejor método para evitarlo es la prevención.

“Ya lo hemos tenido en años anteriores, hace poco más de una década tuvimos más de 5 mil muertes”, agregó.

Mencionó que con la Pandemia del COVID se debe evitar la combinación con el dengue, ya que las dos son enfermedades sumamente contagiosas y mortales.

sj