La educación del poder
Cuando se reflexiona sobre los problemas actuales, que van del medio ambiente hasta los políticos, pasando por los sociales y económicos, siempre llegamos a la misma conclusión: es problema de la educación. Caemos en la cuenta que el pueblo recibe la educación que da el Estado; y que, siguiendo a Ralph Miliband, diríamos que está dirigido por elites del poder.
Nos han dicho, una y otra vez, que la educación es la herramienta, el instrumento, que tiene el pueblo, los países, para desarrollarse, para mejorar. En el caso de México, cada sexenio, nos lo repiten y seguimos igual: reprobados en español, matemáticas, inglés, química, entre otras materias. Y es cuando, en catarsis gubernamental, nos dicen: hay un fracaso educativo.
¿PARA QUE?
La pregunta clave, quizá, sin la menor duda, es preguntarnos: ¿educación para qué? Recuerdo que en la UAT un día cambio el modelo educativo y se estableció, como un propósito, lograr formar alumnos (ciudadanos pues) con mayor capacidad analítica para que, a partir de ahí cuestionara, las condiciones de su entorno. Creo que no funciono: los maestros siguieron igual, con los mismos textos, las mismas didácticas.
Se antoja difícil, complicado, que la elite gobernante quiera, busque, ciudadanos que los cuestionen. Creo que nadie, en su sano juicio, va a crear las condiciones para su propia destrucción. Por eso, prefieren que la gran masa poblacional sea apática, conformista, que sigan con la inercia y no busquen los cambios.
EDUCACION BANCARIA.
Por años, sexenios, la educación que nos dieron en la escuela (aparato ideológico del Estado) que fue calificada como educación bancaria: porque el docente asumía una tarea de solo depositar en el alumno sus conocimientos, reproducir pues, las concepciones mentales de una forma de vida que no trastoque el statu quo. Nuestra mente, hagan de cuenta, es solo un recipiente de conocimientos.
Luis Alberto Machado en su libro “La Revolución de la Inteligencia” postula que todos somos o nacemos con las condiciones para ser inteligentes; pero que, al paso del tiempo, de nuestro crecimiento, unos se van quedando… porque no tienen las mismas oportunidades de aprender, de estudiar y de poner en práctica sus conocimientos. La desigualdad social y económica cumple su tarea de selección natural para restringir la movilidad social.
ROMPER ESQUEMAS Y PARADIGMAS.
Cuenta Gabriel García Márquez en “Vivir para contarla”, sus memorias, que el interrumpió su formación educativa cuando sus padres lo obligaron a entrar a una escuela: en ese momento ya no leí, cuenta, lo que me gustaba; me obligaron a leer textos que no eran de mi interés. Y si, esa es la cuestión: en secundaria y preparatoria, por decir, de literatura aprendí lo que establecía el programa educativo… leí los libros que el profesor marco como “lecturas obligatorias”.
Los gobiernos neoliberales, esos que en la propuesta de AMLO, nos explotaron, nos robaron, nos endeudaron, cada sexenio había reformas educativas: eran, a todas luces, cambios para seguir igual. Recuerdo que, en una de las últimos, el titular de la Secretaria de Educación, llego a decir que con la nueva forma de educar los niños aprenderían a pensar. No, aclaro, ¿pensar qué? La cuestión es que, solo con educación, efectivamente, se puede modificar un comportamiento, una actitud, una forma de ver las cosas.
AMLO Y LA EDUCACIÓN.
Los cambios que está ejecutando AMLO van dirigidos a crear una nueva realidad política y social. La única forma de lograr un cambio permanente es partir de la formación de las nuevas generaciones: ya en el siglo pasado nos decían que la educación era la acción y praxis sobre el mundo para transformarlo… pero no se llevaba a cabo, nos educaban para no cambiar.
Melitón Guevara Castillo
Licenciado en Administración Pública (UAT), Doctor en Comunicación y Periodismo (Universidad de Santiago de Compostela).
Profesor Emérito de la UAT. Líder del Grupo de Investigación “Democracia y Comunicación Política” de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (Victoria, Tam.,).
Representante en Tamaulipas de la Red Nacional de Investigadores de la Calidad de la Democracia.
Escribe la columna política DESDE ESTA ESQUINA, desde 1984 en El Diario de Cd. Victoria y actualmente en Hoy Tamaulipas.
Para que HOYTamaulipas siga ofreciendo información gratuita, te necesitamos. Te elegimos a TI. Contribuye con nosotros. DA CLIC AQUÍ