En tiempos actuales uno de los temas preponderantes en el ámbito local y nacional es el de las imputaciones y/o probables culpabilidades de personajes que abusaron y abusan del poder. Especialmente aquellos que han hecho uso indebido de recursos públicos, por lo cual instancias como la Unidad de Inteligencia Financiera, así como áreas de procuración de justicia los tienen en la mira. Sí, eso ha pasado mucho y sigue lamentablemente pasando y es por eso que definitivamente estamos como estamos, por ese tipo de agravios. Pero en este caso en particular inicio esta colaboración escrita de esta manera ya que en días recientes tuve una muy interesante charla con amigos periodistas y otros que le conocen muy bien al ambiente político, del tipo de plática-debate como aquellos que tanto disfrutaba ver por parte de Lupe Díaz, Alberto Guerra y Rafael Diez Piñeyro en el programa Caja de Pandora. Saludos y respeto para “ambos tres.” Grandes maestros y “plumas” como pocas.

El hecho es que al radicar todos en la capital del estado, el tema se centró en el ambiente político y social prevaleciente. Dando prioridad y respeto a los presentes en dicha reunión, plasmaré aquí aspectos importantes que se tocaron por parte de ellos (ya que yo lo he expresado por este medio en diversas ocasiones) en el acalorado, pero siempre respetuoso debate. Los ahí presentes concordaron en que por las circunstancias actuales un cambio radical y/o sustancial de escenario en la capital tamaulipeca es imperativo.

“El horno no está para bollos, la gente está muy encabronada y cada vez más así lo hace ver, aquellos que toman decisiones deben de ya estar viendo que el manejo clásico de estos asuntos como las imposiciones de personajes ya sean hombre, mujer o lo que sea, no se tendrían que dar. Ya la gente no se lo traga como antes, existe aún mucha ignorancia, pero existen más medios que también ayudan a exponer la realidad. Eso de a fuerzas meter al pariente, amigo, compinche y demás, ya no jalará y el que lo haga se va a topar con una realidad muy cruda de una sociedad harta de este tipo de política, sea el color que sea, todos increíblemente parecen no entender eso.”

Otro de los presentes efusivamente agregó:

“No nos hagamos, los medios también hemos jugado un papel de esquiroles a la hora de enaltecer cosas que sabemos no están bien o que ni nosotros mismos creemos. Todos estamos en busca de la papa y muchas veces eso genera que dejemos a un lado nuestra imparcialidad para dar paso a informar según lo que conviene por un previo acuerdo económico. Tan culpables terminamos siendo como aquellos que todavía manejan ideologías anacrónicas, ¿O acaso estoy mal? No por nada estamos viendo una decadencia política, administrativa y social en la que antes orgullosamente llamábamos ciudad limpia, ciudad amable. ¿Alguien de ustedes puede decir que estamos bien en algún rubro?

Un tercero agregó

“La culpa no es del indio sino del que lo hizo compadre, complacientes hemos sido y todos sabemos que terminamos muchas veces ladrando, pero no mordiendo. Sabemos perfectamente que aquí entre nosotros en unos meses vamos a ver que se van a dejar querer por no decir vender, ¡me canso ganso! (muchas risas y caras de contemplación surgieron) Que si unos con el beisbolista, otros con la prima y alguno con aquel que se la arrima; hasta rima salió cabrones, bien saben que eso va a pasar. Y vendrán cosas peores dijeron alguna vez hace miles de años y no solo no entendimos el mensaje, sino que seguimos igual”. 

El cuarto al turno dijo:

“Fuera de chingaderas, por el bien de Victoria tenemos que ser muy racionales a la hora de apoyar tal o cual causa, los intereses que cada quien tenga tienen que salir por debajo del interés general de que las cosas mejoren para el beneficio de todos, hay cosas que bien se han hecho también en la actual administración, pero nos enfocamos casi siempre en lo malo. Desde hace mucho tiempo tendríamos que haber sido muy exigentes con los partidos para que se vieran sino obligados, de alguna manera forzados a proponer gente con verdaderos perfiles académico, laboral, humano, etc., pero sobre todo personas de verdadero arraigo que sintieran un amor profundo por esta tierra que nos vio nacer. Tanto avance en otros lugares y aquí seguimos estancados en una mediocridad colectiva intelectual, y no es que no haya personas aptas, simplemente o no las dejan, no les conviene al sistema, o por alguna razón o desánimo no se animan.”

Y así continuó está más que interesante charla y créanme que no me pesó traspasar aquí lo grabado, porque pedí permiso en hacerlo ya que sabía que por los ahí presentes la cosa se iba a poner sabrosa. Tuvieron para todo y para todos y entre más se consumían los tragos amargos más candente se ponía. Pudiera haber puesto los comentarios tipo crítica que hicieron al desmenuzar y/o despedazar a aquellos que suenan para competir por la alcaldía, pero por respeto a ellos y en afán de mantener cierta ecuanimidad general los guardaré. Bueno al menos para otra ocasión quizá…

Lo que si fue algo de llamar la atención es que tan difícil que hubiese parecido llegar a un consenso entre los “tremendos dragones”, (digo porque el fuego que sacaban era para espantar hasta el mismo dios Vulcano) fue que aún con críticas y asegunes, la persona que consideraron podía llegar a ser la opción más viable para apoyar o que sienten desempeñaría un mejor papel fue la del Ing. Miguel Mansur Pedraza, actual presidente del club de futbol Correcaminos. No se salvó de críticas pero fueron su arraigo, perfil empresarial, conocimiento de temas municipales y sobre todo su buen trato, lo que logró un consenso de la mayoría.

Y vaya que la jauría no era de perros nada dóciles, (jejeje saludos y respeto absoluto para todos) entonces habrá que decir que el consenso generado en torno a su persona es algo que llama mucho la atención. Por lo leído en varias columnas en estos días, la figura de Miguel Mansur crece fuertemente y esto lo pone en la mira de la ciudadanía y de algún partido que seguramente estará ya muy seriamente pensando en arroparlo y que sea él quien encabece la candidatura a la presidencia municipal de Victoria.

Ante esto, terminaré con el comentario de otro de los amigos allí presentes:

“Bien dijeron hace rato, el horno no está para bollos y menos para improvisados o gente que no represente un real cambio. La pandemia vino a empeorar muchas cosas para miles de personas y el panorama que se avecina es tristemente brutal. El cierre de negocios, el desempleo así como el incremento en la inseguridad que seguramente se presentará derivado de la falta de oportunidades, será un enorme obstáculo difícil de librar. Entonces, si el barco pareciera estar hundiéndose y un gran iceberg está en el horizonte, yo sí quiero saber que en el timón estará un capitán que le sabe y no cualquier pinche marinero. Si no entendemos eso igual que el Titanic nos va a pasar, nos vamos a no solo hundir sino que la vida de miles va a tremendamente empeorar.”

Reflexión ad hoc…

Hablando de reflexionar sobre los desaciertos:

Una vez.- tenía que pasarte

Dos veces.- a todos les pasa

Tres veces.- tienes que cuidarte mejor

Cuatro veces.- este de plano no entiende

Cinco en adelante.- en verdad te encanta la mala vida

Tan es así, que así es…

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)