Nuevo Laredo, Tamaulipas. - La crisis provocada por el Coronavirus ha afectado a cientos de trabajadores de diversos sectores en Nuevo Laredo, entre ellos los dedicados al entretenimiento como el payaso Pancholín, quien cambió las rutinas infantiles por el volante.

Con 13 años de experiencia como payaso, Pancholín asegura que estos son momentos muy difíciles para él y muchos de sus compañeros, que han tenido que buscar alternativas ante la cancelación de espectáculos y fiestas como medida restrictiva ante la pandemia.

“No hay trabajo para mí, no hay trabajo para más compañeros, para meseros, para banqueros, es una cadena y desafortunadamente tenemos que buscar la manera de sobresalir, cubrir los gastos de la casa”, expuso.

Comentó que la pandemia vino a afectar al gremio de payasos en un mes en el que la mayoría tiene una gran cantidad de trabajo, como lo es abril cuando hay muchos festejos por el Día del Niño, inclusive de dos a tres por día.

"Está complicado el asunto porque sabemos que para una fiesta se reúne la gente y lo que están pidiendo las autoridades sanitarias es que no haya reuniones de más de 10 personas", dijo.

Debido a esto y que de su trabajo como payaso depende su familia, Pancholín con mucho entusiasmo decidió comenzar a ofrecer sus servicios de transporte con su vehículo.

“Estoy haciendo mandados, estoy transportando gente, si quieren una comida de tal restaurant me hablan y me dicen oye necesito una comida de tal parte, tal parte, ya que no cuentan con servicio a domicilio ¿cuánto me cobras? ya voy, compro las cosas y se los llevó a domicilio”, explicó.

Dijo que muchos de sus compañeros están buscando la forma de sobresalir de esta dura situación en la que los escenarios, los aplausos, las risas de los pequeños, han tenido que cambiar por rutinas diferentes.

“Andamos tipo Uber, que a lo mejor es algo que yo pienso que no está mal, hay compañeros que están haciendo este tipo de cosas para poder sobresalir, entonces es lo que a mí se me ocurrió para hacer, para no quedarme como que no hay fiestas, no voy a hacer nada, me va a ir mal, no voy a tener que comer, que llevar a mi familia, el pan, entonces de una manera hay que moverse’”, explicó.

El payaso Pancholín precisó que desde un principio se dio cuenta que vendría una situación más adversa, por lo que comenzó a tomar medidas preventivas y aunque muchas personas le cancelaron, la gran mayoría re agendaron sus fiestas, por lo que espera que una vez pasando la cuarentena y se permitan nuevamente las piñatas, pueda seguir haciendo sonreír a chicos y grandes.

oal