¿Importa que salga en la portada de un libro la imagen del autor? Habrá quienes no estén muy de acuerdo por aquello del ‘culto a la personalidad’, pero habrá quienes pensemos todo lo contrario. Una de las razones por la cual considero que sí debe salir en la portada la imagen del autor es porque este aún no es conocido. Pueden existir más razones como para estar de acuerdo en que sí debe aparecer en la portada, de eso no me cabe la menor duda.

Eso es, por un lado. Ahora, si lo vemos por el lado motivacional es interesante ver la imagen del autor al momento de estar sonriendo; cuando a través de sus expresiones corporales nos trasmite un mensaje positivo, ya sea por medio de sus gestos o en su modo de vestir. Para los que nos encargamos de nuestra propia imagen, es decir, que no le pagamos a nadie para que nos haga el trabajo de imagen, pues tenemos toda la libertad de decidir cómo será la manera apropiada para darnos a conocer.

Hay dos puntos importantes que debemos tomar en cuenta para el trabajo de portada, a reserva de lo que el lector ya conozca o sea experto en la materia. Por experiencia propia puedo decir que se debe tener bien clara la idea del título del libro. Dos, que se elija con mucho tiempo la foto para la portada. Puede ocurrir que, a un día de meter el PDF a la imprenta, surjan cambios tanto del título como de la foto de portada, y hacer un mínimo cambio de última hora genera más cambios de última hora, lo cual representa un retraso de tiempo muy significativo.

Aunque el cliente es el que manda, sólo que a veces esos cambios pueden llegar a provocar que se caiga la idea esencial del tema. 

Normalmente ponemos nuestro libro en manos de la diseñadora (en el caso de que así sea), y dejamos que sea ella quien se encargue de sugerirnos las propuestas de portada, ‘pero’ resulta que no estamos muy convencidos de los colores, ni con el diseño y que el fondo donde va nuestra imagen no es el que nos agrada.

Yo diría que dejemosa la diseñadora para que haga su trabajo, mientras que nosotros nos vamos a tener que ocupar de hacer algunas pruebas de diseño.

A estas alturas en que casi todo mundo sabe cómo diseñar sus imágenes, sería bueno que jugaras con tu propia imagen o foto, e imagines cómo te gustaría que saliera tu foto de portada para el libro.

Una vez que se hayan realizado las suficientes pruebas de portada o que ya se tenga bien clara la idea de lo que se quiere dar a conocer, entonces puedes mostrárselas a la diseñadora para que ella perfeccione tu idea para la portada del libro.

Trabaja tu idea con mucho tiempo y no a la mera hora. Si piensas en escribir y dar a conocer tu libro, es el mejor momento para pensar en tomarse en serio lo de modelar, puedes ir en busca del lugar adecuado para la sesión de fotos, porque eso sí, tu imagen debe salir en la foto de portada.

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Ricardo Hernández Hernández
Poeta y columnista

Colaborador del portal:” Hoy Tamaulipas” hasta la fecha.
Actualmente estoy cursando un “Diplomado en Creación literaria” en la Biblioteca del Centro Cultural Tamaulipas, con el maestro José Luis Velarde.