Los tamaulipecos hemos atestiguado cómo, al paso de los tres años recientes, el rostro y el ánimo de nuestro querido y atribulado estado a cambiado para mejor forma. 

Todavía nos llena de coraje y tristeza el recuerdo cercano, que nos marcó con un antes y un después, del atentado fatal en junio del 2010, que truncó la ascendente carrera de un seguro Gobernador de buen perfil para Tamaulipas. Me refiero de la muerte de mi amigo Rodolfo Torre Cantú.

Un antes y después porque usted estará de acuerdo, que desde ese atentado criminal, nuestro boyante estado cambió para empeorar, siendo presas desde entonces de la violencia e inseguridad, al grado que los tamaulipecos dejamos de salir dentro de las ciudades y de las carreteras a ciertas horas de la tarde noche. 

Ni que decir de los asesinatos con tiro de gracia que en ese mismo año se registró contra 72 migrantes centroamericanos, en una bodega de rancho del municipio de San Fernando. 

La sustitución del candidato fallido no pudo quedarse en peores manos que las del hermano incómodo Egidio Torre Cantú. Tan grave fue el relevo que Tamaulipas sufrió el peor retroceso que tengamos memoria. 

Por eso, vale recordar esos y muchos otros sucesos entre el 2010 al 2016, que permitió a los ciudadanos repensar su voto hacia el cambio. Ese cambio sucedió registrando el actual Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, una votación histórica mayor al 56% del electorado del estado, dando por primera ves un giro después de más de 70 años de gobiernos priistas hacia uno panista.

Recordamos que el 15 de junio de 2016 se anunciaba que, además de haber ganado la gubernatura con Francisco García Cabeza de Vaca, los albiazules se perfilaron para gobernar en 24 de las 43 alcaldías y controlar 16 de las 22 diputaciones de mayoría relativa. Esto es el 56% del territorio y la población. 

Este éxito electoral, se repitió y amplió más aún en las recientes elecciones locales de junio de 2019, donde el Partido Acción Nacional (PAN) obtuvo una clara ventaja en 21 de los 22 distritos electorales para diputados al congreso local. 

En ese análisis y ánimo, ahora el gobierno de Tamaulipas a través del ejecutivo rendirá el próximo miércoles 25 su Tercer Informe de Gobierno. 

Por lo que en voz del propio Gobernador, seguramente nos repetirá lo que hemos logrado en avances importantes. Por ejemplo, Tamaulipas ha dejado de pertenecer a la lastimosa lista de los estados más violentos del país.

Tenemos la quinta menor tasa de victimización, el número de víctimas de homicidio y feminicidio se redujo en un 29% con respeto al año pasado, en claro contraste con la tendencia nacional.

Solo uno de cada 20 secuestros que se denuncian en todo el país tuvo su origen en el Estado. La extorsión, según datos oficiales, reporta un decrecimiento sostenido por más de seis trimestres consecutivos.

Por la parte de nuestra economía, ya escuchamos los spots que nos recuerdan que retomamos el crecimiento Económico, la generación de empleos formales, el turismo, a la par que somos el principal estado productivo en energía eólica.

Son muchos los motivos de orgullo que los tamaulipecos escucharemos el próximo miércoles, pero también observamos que se han generado voces de cuestionamientos que con seguridad serán superados ante las investigaciones en proceso.

Es claro que se quieren meter zancadillas a un gobierno que ha dado respuestas y buenas cuentas...

Jorge Alfredo Lera Mejía

Tampiqueño, Economista (ITAM), LAE, Maestro en Economía y Doctor en Administración Pública (UAT).

Asociado del INAP, Subsecretario del Exterior de la Federación del Colegio Nacional de Economistas y Vicepresidente zona noreste de la LER. Inicia su carrera en 1977 y ha desempeñado diversos cargos en la Administración Pública Federal, en Michoacán y en Tamaulipas.

Catedrático en la UNAM, ITAM, ULSA y actualmente profesor-investigador por la UAT e Instructor de la Auditoría Superior de la Federación.