Aguascalientes, (Notimex).- Con la motivación que le dio el título de la Liga de Campeones de Concacaf, Monterrey llega entre los favoritos a la Liguilla del Torneo Clausura 2019 para medirse ante Necaxa, que está obligado a sacar ventaja de su localía este jueves si quiere aspirar a las semifinales.

Rayos y Rayados se verán las caras a las 19:00 horas en el estadio Victoria, duelo donde Diego Montaño Robles será el encargado de aplicar el reglamento en la “ida” de los cuartos de final de una serie histórica, pues será la primera vez que se enfrenten en Liguilla.

Apenas la semana anterior el cuadro regiomontano confirmó su calidad al proclamarse campeón de la zona de Concacaf en el “clásico norteño”, título que los llenó de motivación para afrontar la “fiesta grande” del balompié mexicano.

Conscientes de que empieza un nuevo torneo en la Liguilla, los pupilos de Diego Alonso quieren encontrar regularidad, algo de lo que carecieron en la recta final del certamen, pues en sus últimos siete partidos perdieron tres, por dos triunfos y dos igualadas.

Pese a tal situación, terminaron el torneo con 30 unidades en la tercera posición general, lo que les permitirá resolver esta serie en calidad de anfitriones.

Necaxa, por su parte, regresa a la Liguilla desde el Apertura 2016 y con un compromiso difícil, a lo que se suma la ausencia de Brian Fernández, quien previo al inicio de la Liguilla se fue a la Mejor League Soccer (MLS) y será una baja importante.

Con 12 goles en el certamen Fernández fue el mejor hombre de Rayos a la ofensiva, y aunque ya no podrán contar con él, en el equipo de Guillermo Vázquez aseguran que tienen con qué para suplir la ausencia.

Necaxa, que sumó 29 unidades para terminar en la sexta plaza general, llega con una racha de cuatro partidos sin conocer la derrota y con un revés en sus últimos ocho duelos, mismo que fue ante el líder León.

La serie entre Necaxa y Monterrey será histórica, pues nunca se habían enfrentado en una serie de Liguilla. De sus últimos 10 juegos con Rayos como local, el anfitrión ha ganado tres, por el mismo número de empates y cuatro reveses.