Nuevo Laredo, Tamaulipas.- El presidente municipal Enrique Rivas y su esposa Adriana Herrera Zárate, presidenta del DIF, junto con anfitriones, cortaron el listón inaugural del auditorio ‘En Cristo está la Victoria’ y develaron una placa, en el contexto del XV aniversario del Centro de Restauración Familiar.

Rivas Cuéllar dijo sentirse honrado de la invitación y destacó que Nuevo Laredo es uno de los pocos municipios a nivel nacional, donde un gobierno cuenta con una oficina de asuntos religiosos.

"Nuevo Laredo es de los pocos municipios en Tamaulipas y en el país, que cuenta con una oficina municipal de este tipo, para atender los temas correspondientes a estas organizaciones. Esta oficina es el área responsable de ser enlace, gestor, proporcionar servicios entre el gobierno y asociaciones o agrupaciones religiosas, comunidades y liderazgos", aseguró el munícipe.

Añadió que es un compromiso del gobierno municipal impulsar y facilitar acciones para el desarrollo institucional de las asociaciones religiosas, sumando esfuerzos y capacidades en beneficio de la comunidad.

El pastor Sergio Almora Pérez agradeció a Enrique Rivas por aceptar la invitación, y por el apoyo del gobierno municipal para la realización del auditorio ‘En Cristo está la Victoria’, posteriormente le hizo entrega de un reconocimiento y lo exhortó a continuar ayudando.

"Gracias a todos ustedes este auditorio se ha construido para la gloria de Dios, y gracias también a nuestras autoridades, nuestro amigo el presidente municipal Enrique Rivas por aceptar ser partícipe y cortar el listón junto con nosotros para inaugurar este auditorio, con esto decimos a todo Nuevo Laredo que aquí hay una iglesia llena de amor y milagros", dijo.

El auditorio con capacidad para mil personas, está ubicado en bulevar Leyes de Reforma 9503, en la colonia Constitucional.

Al evento también asistieron las regidoras Alma Rosa Castaño y Samantha Bulás Liguez; Raúl López, director de Asuntos Religiosos del gobierno municipal; Alfonso Salas, rector de la Universidad Tecnológica de Nuevo Laredo; y el presbítero Antonio Rodríguez.