Nuevo Laredo, Tamaulipas.- Un menor de cinco años y un veracruzano deportado, terminaron con quemaduras en sus cuerpos en distintos hechos ocurridos en el sector poniente de Nuevo Laredo, durante la tarde y noche del miércoles.

El primer caso fue el del veracruzano deportado, quien el miércoles por la tarde sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en su espalda.

Protección Civil informó que el veracruzano identificado como Juan, de 24 años, encendió una fogata dentro de una casa abandonada, en la que vive provisionalmente para mitigar el frío.

En eso se quedó dormido en su “cama” y el fuego lo alcanzó, sufriendo graves quemaduras en su espalda.

Juan fue atendido en el 4234 de la calle Isidoro Sánchez en la colonia 150 Aniversario, aunque los hechos ocurrieron a unas cuadras del lugar, según se dijo.

El veracruzano dijo que prendió una fogata ya que tenía frío, pero se quedó dormido y el fuego alcanzó su cama y a él, terminando internado en el Hospital General.

Mientras que el caso del niño ocurrió horas más tardes en el interior de una vivienda de la colonia Valles de Anáhuac, al extremo poniente de Nuevo Laredo.

Juan Esteban, de apenas 5 años, sufrió quemaduras de primer y segundo grado en su cuerpo al caerle encima un balde de agua hirviendo.

Este incidente se registró en Avenida 4 cuadra 1119 y debido a la premura del caso, familiares lo llevaron a la subestación número 5 ubicada sobre el Bulevar Canseco.

Sin embargo, por las quemaduras que sufrió fue necesario trasladarlo de inmediato al Hospital General.

En cuanto a cómo sucedió el percance, se informó que la madre del menor preparaba agua para bañar al menor y a su hermanito, también menor de edad.

Se dijo que de pronto, ya estando en el baño, el más pequeño empujó jugando a Juan y éste cayó precisamente cuando su madre vaciaba el agua hirviendo a una tina.