¿Por qué fracasan los sistemas aquí en México? ¿Por qué recientemente se vieron estrepitosos reveces por parte de instituciones políticas que supuestamente ostentaban un gran poder y/o influencia en el entorno nacional? Preguntas que se hacían un par de amigos mientras contemplaban el entorno prevaleciente tanto estatal como nacional. Y aún que para estas alturas podemos sacar un sinnúmero de conclusiones sobre los factores que influyeron en la decadencia de dichos sistemas, podemos ahorrarnos tiempo simplificando y resumiendo en que todo fue debido de las tres (SSS).

Soberbia, saqueo y simulación.

Póngalos en el orden que quiera usted mi estimado lector según lo crea conveniente pero seguramente podrá coincidir en que estas tres palabras definen muy claramente lo que muchos personajes se han encargado de hacer para que fracasen las instituciones y por ende nos encontremos en tan lamentables condiciones. Tan dominaron su arte, que se volvieron maestros de lo reprobable y repugnante, aunque ellos pensarán lo contrario, sintiéndose a su vez como reyes de un imperio cuando terminaban siendo viles hampones. Llenos de tremenda soberbia que fueron acumulando por años como también por complejos evidentes y la falta de valores inculcados, faraónicamente se paseaban sintiéndose magnánimos y esperando una tan anhelada falsa pleitesía, que alimentaban sus enormes egos.  

Fueron los mismos que saquearon (y saquean) sistemáticamente las arcas en lugar donde se les pusiera, porque hay que recordar el verdadero sinvergüenza en todo lado saca a relucir sus “dotes”. Protegidos por un sistema laxo y complaciente, hacían de las suyas, beneficiando generalmente solo a un grupo determinado así como aquellos que decidían convertirse en sus lacayos y cómplices. Y todo esto seguido de una simulación perversa que iba carcomiendo lentamente todo de lo bueno que quedaba, en detrimento de aquellos que sí trabajaban duro, de todos los fieles que en una buena causa creían pero que terminaron siendo testigos de una diabólica debacle.

Soberbios, saqueadores y simuladores…¿o no es así?

Jorge Alonso Infante Alarcón  

Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.

Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)