Tampico, Tamaulipas. - El arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, ofició su primera misa a su llegada a la Diócesis de Tampico, donde es administrador apostólico por designación del papa Francisco.

Monseñor estuvo acompañado del vicario general de la diócesis, Elías Gómez Martínez, y por los sacerdotes del órgano eclesiástico Pedro Cruz, José León y Gerardo Enrique Buendía, que permitieron la concelebración de la homilía.

También participaron religiosas y presbíteros de la Diócesis de Tampico, estando presentes un sinnúmero de creyentes católicos que se dieron cita en la Iglesia Catedral de esta ciudad porteña.

En su mensaje, el arzobispo de Monterrey, indicó a los presentes que va a estar en Tampico unos días atendiendo los asuntos de la Diócesis, porque sigue estando al frente desde la capital de Nuevo León de otras diócesis.

Expuso que estuvo conversando con los integrantes del presbiterio, responsables de la Catedral, con todos los que le ayudarán para salir adelante de los diversos desafíos que impone esta encomienda del papa Francisco.

Le dijo a la feligresía que estará atendiendo ambas funciones hasta el nombramiento del nuevo obispo de Tampico, por parte del santo padre, que espera sea pronto, quizá para antes de la Navidad.

En estos días volverá a tener reuniones con los sacerdotes y el obispo José Luis Dibildox Martínez, quien convalece en Tampico por su enfermedad, para irse a Monterrey, esperando regresar el próximo domingo.

aasf