Con sus palabras apretaron de plano fuerte el cuello a los mexicanos y mataron la esperanza de todo aquel  paisano que soñaba con que su país regrese a aquellos tiempos que el famoso Chava Flores dibujaba en su sabrosa y sentimental melodía “Mi México de Ayer”, pero eso, quedo ya en el olvido.

Ese cronista musical hablaba en si en dicha canción del Distrito Federal, pero la provincia mexicana no era tan distinta, porque el orden, la unión familiar y las tradiciones se acariciaban las mejillas y hacían que todos se contagiaran de con una sonrisa que los originarios otros países del mundo, envidiaban.

Y es que si por ejemplo de seguridad se habla, Chava Flores narra que “al pasar los soldados salía la gente a mirar inquieta” y “hasta el tren de mulitas se detenía oyendo las trompetas”, lo que significa el cariño que en aquellos tiempos se sentía por los guardianes.

“Esas cosas hermosas porque así yo las vi, ya no están en mi tierra, ya no están más aquí, porque cuando era niño tenía mi México un no sé qué”, definía el pintor urbano entre la diferencia el pasado y el presente de un país.

Ahora dicen Enrique Peña Nieto y Miguel Ángel Osorio Chong que se fracasó en materia de seguridad y, eso bajo el ánimo, fulminó la esperanza que se tenía sobre todo en Tamaulipas, para que en este estado norteño no se viva en la punta de la desgracia y la desesperación.

Y cómo no, si Tamaulipas se coloca en los primeros lugares de violencia, de secuestros, de inseguridad y el estilo de vida de sus habitantes pintado por un peculiar color blanco ha pasado uno rojo brillante.

Eso, a cruzado las fronteras, porque medios europeos ubican a México en el tercer lugar a nivel mundial con brotes de estrés sumamente delicados, que cada vez en mayor cantidad llevan a la tumba a todos aquellos que han enfermado o que han sido víctimas de la delincuencia sin saber que caminan al lado de uno de ellos.

Aquí en Ciudad Victoria, un diputado del PRI de nombre Alejandro Etienne Llano, ha dicho que urgen policías y que respaldaran los esfuerzos que se hagan en ese sentido, lo que habla de que el gobierno de Tamaulipas, al frente del cual se encuentra el panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, tiene todo el apoyo sin celos, sin venganzas y sin diferencias cuando se vaya a favor de la ciudadanía.

El fondo de todo esto tiene que ver con la convocatoria que lanzo el gobierno estatal sobre el reclutamiento para la formación de elementos policiacos que previa preparación tendrán un sueldo mensual de 15 mil 900 pesos, becas escolares, atractivos bonos y una carrera de la cual se encargara la Universidad de Seguridad y Justicia de Tamaulipas, cuya fecha de inscripción permanece abierta.

Y no se trata de una Universidad cualquiera, porque conserva un Código de Ética que habla de lucirse con elementos policiacos con una actuación íntegra, honesta, responsable, digna, imparcial y respetuosa, pero sobre todo con un total “no” hacia la discriminación.

Ya en una ocasión el gobernador entrego a la sociedad 171 elementos policiacos preparados por esa universidad, por lo tanto el diputado del PRI, tiene razón.

Los requisitos para los interesados están a la mano y a la sociedad tamaulipeca le corresponde elevar su voz para apoyar a quien va en serio contra  todo aquello que lastime, que preocupe, que impida que se viva en un ambiente como aquel que hoy se extraña, como lo dijo Chava Flores.

No se vale que la crueldad, la profanación, el ensañamiento, el atropello, la furia y la violación sigan haciendo presa de los tamaulipecos.

Pero si, que ahora esté al frente de esta entidad una figura que le busca y que le busca para pintar en el rostro otra vez una sonrisa.

Mediante dos golpecillos, en la mejilla.

Correo electrónico: tecnico.lobo1@gmail.com 

Javier Rosales
Columnista en Tamaulipas. Su columna Anecdotario es publicada en diversos medios de comunicación.