La obra “Los de Abajo”, cuyo autor es el mexicano Mariano Azuela, es una novela de estilo realista basada en experiencias que vivió su autor y que trata de la Revolución Mexicana entre los años 1910 y 1920; es una de las obras más representativas, en la cual narra una vida llena de carencias, incertidumbres e inconformidades que llevan a los campesinos a organizarse para luchar por sus derechos formando grupos revolucionarios, tal como lo hizo Demetrio Macías quien es el protagonista de la historia.

Con su valentía y por protestar contra un gobierno que los tenía oprimidos, forma un grupo con los campesinos más amigos y se van a luchar por unos ideales sin darse cuenta que a medida que pasa el tiempo ocurren muchos acontecimientos que hacen que éstos se vayan perdiendo ya que en vez de llevar la tranquilidad a los pueblos se convirtieron en un gran grupo revolucionario que llegaban a robar, abusar de las mujeres y a acabar con los que no estuvieran de su lado; esto hizo que se presentara el desplazamiento y abandono de los campos; además, ganarse el rechazo de las gentes por todos estos abusos, sintiendo ellos mismos que sus principios se habían perdido y que al final luchaban sin saber por qué.

Vemos pues, en esta novela muchas de las características del estilo realista y una de ellas es que se narran hechos verídicos que se vivieron en la Revolución Mexicana; ahora bien, todas las revoluciones tienen su inicio en un descontento por las diferencias y la mala repartición de las riquezas; los más humildes tienen que soportar de los de arriba, de los que gobiernan y tienen el poder, los abusos más grandes, razón por la cual se organizan para protestar.

En un reporte de José Rafael Moreno Quevedo, se dice que, Mariano Azuela toma partido con la realidad que vivía su pueblo y en Demetrio y sus amigos, plasma con crudeza y sin omitir detalles cada uno de los encuentros que este grupo de campesinos tiene con los soldados federales y de los abusos que todos los implicados en la guerra cometían con sus mismos hermanos como eran los robos, las violaciones, los incendios y el sembrar el terror por donde pasaban.

Y es que el grupo de Demetrio conformado por sus más amigos y que algunos de los cuales habían tenido sus problemas con la ley, fue creciendo a medida que se movían por todo el territorio ya sea por la fama que estos tenían de ser fuertes o por huir de los federales; vemos que no todos tenían el mismo ideal, el cual era tener una patria con libertad y con oportunidades para todos, sino que metiéndose en él se podían enriquecer; pero esto fue malo para este pequeño ejército pues se unieron muchos que eran demasiado malas personas (SIC) como es el caso del Güero Margarito, quien era totalmente despiadado ya que disfrutaba y hacía fiesta del sufrimiento de los demás, abusaba de todo lo que se le pusiera al paso sin importarle si eran viejos, jóvenes o niños, para él la guerra significaba el abuso total; era pues  el tipo de hombre que muy comúnmente encontramos en esa época.

El autor nos detalla también los problemas psicológicos del ser humano en los que encontramos personas perversas como el Güero Margarito y ambiciosos como Luis Cervantes, puesto que este último, se fue con el ejército de Demetrio, con el ideal de luchar y sacar adelante una Patria, en demostrarle al gobierno y sus fuerzas que la gente de abajo, quienes son los que los eligen tiene derecho a vivir con dignidad y no siendo oprimidos todo el tiempo por ellos; pero como vemos, al principio del libro, no era bien recibido por ser “un señoritingo”.

Luego se dan cuenta que el hecho de tener algo de estudios en medicina les podía servir para cuando fueran heridos y de haber sido periodista le daba una ventaja sobre ellos; además, él sí sabía hablar de temas interesantes que los hacía reaccionar, haciéndoles entender lo importante de la lucha, además, pensaba en lo grande que era ser revolucionario para el bien del país; luego su pensamiento no fue tan fuerte y se dejó llevar por la barbarie general y al igual que todos entraba abusando de la confianza de las personas, de las mujeres y robando como todos de una forma disimulada que los demás no notaban; sólo Demetrio se daba cuenta y lo aprobaba; cuando ya tuvo todo el dinero que pudo con todas las joyas que encontró en cada una de las casas saqueadas, se fue a los Estados Unidos.

El estudiante de Historia, en la UAMCEH (UAT), sostiene que Demetrio, al contrario de muchos, luchó por su ideal hasta el final; aun sabiendo que ni él mismo entendía por qué seguían peleando, si su líder Pancho Villa había sido derrotado, las razones de su lucha eran confusas y la gente por la cual ellos habían luchado no los quería por todo el daño que hacían a su paso: el saqueo de las casas, el abuso de sus mujeres y el asesinato de quienes ellos creían eran simpatizantes del gobierno; el autor nos cuenta como era la vida de estos revolucionarios, además nos ayuda a entender más el contexto histórico de la Revolución, pues el autor lo hace de manera muy amena; en experiencia personal se me hace más llamativo aprender de nuestra historia por medio de novelas históricas como ésta.

Correo: amlogtz@gmail.com

Ambrocio López Gutiérrez

Periodista y Sociólogo.
Columnista en diversos medios  electrónicos e impresos.
Redactor en el equipo de Prensa de la UAT.
Profesor de horario libre en la UAM de  Ciencias, Educación y Humanidades.