México, (Notimex).- El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) busca probar con evidencias que la discriminación en México es estructural y no sólo un problema de casos específicos, con el fin de revertir esta tendencia, destacó la presidenta de este organismo, Alexandra Haas Paciuc.

Durante su participación en la 74 Reunión Plenaria de la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI por sus siglas en inglés), Haas Paciuc expuso que una persona con discapacidad gana 151 por ciento menos que otra con igual edad y preparación que desempeña el mismo trabajo, además, ningún joven indígena de entre 20 y 24 años que no habla español logra concluir la preparatoria.

Por ello, dijo, el Conapred impulsa una agenda de investigación desde esta perspectiva de discriminación estructural, para llamar la atención sobre las desigualdades que persisten en el país, lo cual se sustenta en un estudio reciente del organismo.

Existen brechas en el acceso a derechos para las mujeres, las personas con discapacidad y los pueblos originarios, grupos que históricamente han sido discriminados, afirmó Haas Paciuc.

En un comunicado, detalló la realización de la tercera Encuesta Nacional sobre Discriminación en México 2017 (Enadis), en colaboración con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Lo anterior, explicó, permitirá contar con información sobre los prejuicios, actitudes y experiencias de discriminación.

También se realizará una encuesta en línea sobre discriminación para comunidades Lésbico, Gays,? Bisexuales y Transexuales (LGBT), además de la participación del Conapred en las Encuestas sobre Migración a las Fronteras Norte y Sur de México (EMIF), que aportan información empírica sobre problemáticas específicas.

El Conapred representa a México en la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia, cuya 74 edición se celebra desde el pasado 5 de diciembre y concluye este viernes en Estrasburgo, Francia.

México es el único país que no es europeo y que participa como observador en los trabajos de ese organismo compuesto por personas expertas de diversas naciones.

En el foro se comparten experiencias sobre las mejores prácticas para combatir la discriminación, el racismo y otras formas de intolerancia, así como para recuperar aprendizajes de acuerdo con los estándares de protección de los derechos humanos.

La reunión plenaria de la ECRI se enfocó en el análisis de siete reportes de países y la aprobación de la Recomendación General de Política Pública número 2 sobre Organismos de Igualdad, con discusiones en temáticas pertinentes para México relativas a políticas de prevención y combate a la discriminación, generación de datos, legislación sobre crímenes y discurso de odio, entre otros.

En la reunión plenaria participaron 47 países europeos, además de México y la Santa Sede, los dos estados observadores.