Ciudad Madero, Tamaulipas.- Al menos 80 casos de homicidios y desapariciones relacionados con la homofobia, se tienen registrados en Tamaulipas durante los últimos seis años, informó la presidenta de la Asociación en la Lucha por los Derechos Humanos Marbella Bernal Robles.

Se trata de delitos que datan del 2011 a la fecha, el último caso se registró en Matamoros el pasado 25 de noviembre de 2017, donde el líder de la comunidad lésbico-gay Gregorio Alvízu fue asesinado a golpes en su domicilio.

Explicó que la mayoría de estos casos se registran en el sur del Estado y la frontera, “es una situación que estamos viviendo los activistas, hacemos un recordatorio para todas estas personas que han fallecido sobre este chico que falleció en Matamoros a consecuencia de la homofobia".

Señaló que el miedo es tanto que gran parte de la comunidad ha tratado de mantenerse ocultos, pues aseguró que no hay garantías de seguridad, “realmente es algo que preocupa porque no tenemos la seguridad por parte de las autoridades, no tenemos la protección".

"No tenemos el respaldo por parte del Gobierno, ellos toman medidas y lo que queremos es que haya esa seguridad por parte de ellos hacia nosotros, que haya respaldo, protección", expuso.

Enfatizó, “vemos que fuera de la comunidad no se ve esa seguridad, imagínense dentro de la comunidad gay".

“Tenemos del 2011 a la fecha que fueron cuando empezaron a matar chicas en la zona centro, chicas trans, eran muchas las chicas trabajadoras sexuales y desde ahí empezamos a ver esos crímenes y pues ha llegado a una cantidad de 80 personas en esos seis años", comentó.

Bernal Robles dejó en claro que se trata solo de los casos registrados y reportados, por lo que no descartó que pudieran ser más en la entidad y obviamente en la zona conurbada, es decir Tampico, Ciudad Madero y Altamira.

Precisó que “se han dado muchos casos en Tampico, Madero, Altamira y Reynosa, son crímenes violentos, gente que desaparecen por el solo hecho de tener una preferencia distinta”.

"Lo que hacen es ocultarse, es como si estuvieran en un campo de refugiados. No quieren ni salir, prefieren irse a otras áreas que ir a los hospitales, no quieren ser visibles", finalizó Marbella Bernal.

oal