Tijuana, (Notimex).- Para un mejor aprovechamiento del programa de nutrición que implementó el sistema de guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), es necesario que se aplique en los hogares y lo adopten las familias, señaló la institución.

Francisco Iván Beltrones Burgos, delegado del IMSS en Baja California y San Luis Río Colorado, Sonora, explicó que desde 2016 en todas las estancias se ofrece a los niños un menú sano, con el propósito de propiciarles mejores expectativas de salud e inculcar en ellos buenos hábitos alimenticios.

Se trata, dijo, de ofrecerles comidas con productos saludables, libres de azucares añadidos y en cantidades que cumplen estándares de nutrición de acuerdo con la edad y peso de los infantes.

“Lo que buscamos es revertir desde la infancia índices de sobrepeso y obesidad que afectan a un gran porcentaje de población en México”, subrayó.

El funcionario precisó que a los padres de familia se les comparten los menús que se les dan a los niños, además pueden consultarlos en la página de internet del institito.

Beltrones Burgos los invitó a no modificar el régimen alimenticio en el hogar y evitar consumir productos denominados chatarra.

La modificación de los menús de las guarderías del IMSS, además de eliminar azúcares añadidos, incorpora ácidos grasos esenciales y granos integrales, lo que representa un paso fundamental para reducir el riesgo de que adquieran enfermedades del síndrome metabólico en la edad futura.

“El refuerzo al programa nutricional que se brinda a los pequeños en sus estancias, pretende impulsar para ellos vidas saludables a largo plazo”, destacó.

Recalcó que según algunas investigaciones científicas el sobrepeso y la obesidad en menores de cuatro años prevalecerán en etapas subsecuentes de su vida.

Por esta razón, anotó, una alimentación saludable y una activación física adecuada, constituyen una base sólida para el adecuado crecimiento y desarrollo.

Destacó que con los cambios el beneficio principal será que los futuros jóvenes y adultos tendrán mayor capacidad y predisposición para tomar decisiones de alimentación saludable.

Reiteró que los hábitos que se formen en la infancia dentro de las guarderías del IMSS, también deben repercutir en las familias de los menores.