Matamoros, Tamaulipas.- El encargado del módulo del Migrante instalado en la Central de Autobuses en Matamoros, Juan Antonio Sierra Vargas, comentó que últimamente nuestros paisanos deportados llegan enfermos y a veces hasta golpeados. 

Lo anterior tras reiterar que no ha habido aumento en el número de deportaciones por esta frontera.

Puso como ejemplo a un residente del Estado de Michoacán, que se mantuvo por varios días en la Casa del Migrante, hasta que su familia vino por él, pero que mientras tanto, fue atendido por el médico del inmueble, situación que les mantiene con mucha preocupación por el estado en el que llegan.

Se trata de personas enfermas y otros más con problemas psicológicos bastante serios debido a traumas ocasionados por golpes, incluso mencionó que anteriormente atendieron bajo las mismas circunstancias a un mexicano del Estado de Chiapas; "él fue golpeado en el Centro de Detención en donde lo tuvieron en el lado americano".

Sierra Vargas dijo que la situación es tan complicada que vienen hasta con pérdida de memoria, no recuerdan quiénes son y de donde son, por lo cual tienen que ser atendidos para que puedan recordar algo de su paradero, ya que vienen sin un solo documento que los identifique.

Añadió que bajo el tratamiento psicológico y los cuidados del personal de la Casa del Migrante es como ellos logran poco a poco reaccionar y recordar algo, que es cuando se ponen en contacto con sus familiares.

El también administrador de la Casa del Migrante subrayó que ellos les brindan los primeros auxilios a las personas que llegan a México en esas condiciones, sin embargo, en algunas otras ocasiones han tenido que recurrir a los servicios médicos del Hospital General.


Bamp