México, (Notimex).- Inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) aseguraron 133 acumuladores usados y 359 kilogramos de acumuladores pequeños de motocicleta en la ciudad de Mérida, Yucatán.

Esa medida se aplicó debido a que el responsable de los residuos considerados como peligrosos no presentó la autorización para su transporte y recolección.

En coordinación con policías federales, personal de la Profepa inspeccionó el cargamento de residuos peligrosos detectados, por lo que también aseguró el vehículo en el que se transportaban los acumuladores.

El conductor del vehículo no mostró la autorización que expide la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para el transporte de los acumuladores.

Los inspectores federales constataron que tampoco contaba con los manifiestos de recolección de residuos peligrosos que se transportaban como lo establecen las disposiciones legales vigentes.

Los acumuladores usados son residuos peligrosos en términos de la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos; para su transporte se debe contar con una autorización de la Semarnat.

Estos hechos, constituyen infracciones que pueden ser sancionadas con el equivalente de 20 a 50 mil unidades de medida y actualización, es decir hasta 3.7 millones de pesos cada una.