Calzonzin Inspector
Platicando entre amigos sobre nuestra situación actual imperante, uno de ellos recordó una película que le había no solo causado gran hilaridad sino que mostraba magistral y muy cómicamente mediante una sátira política muy certera, la triste realidad de nuestro país. Alfonso Arau, quien no solo actuó sino dirigió la película, en el año de 1974 contextualizó en su largometraje una singular manera de conducirse de personajes políticos en nuestro país, el sistema que nos caracterizó y caracteriza y la razón por la cual estamos como estamos. En colaboración con el historietista mexicano, Eduardo Ríos “Rius”, lograron realizar una adaptación de los personajes de este último y plasmarlo como una fuerte crítica a la corrupción del sistema político mexicano como también la restricción a la libertad de expresión en el país.
Aquellos que tuvieron la oportunidad de ver y disfrutar la película de “La Ley de Herodes” seguramente disfrutaran de esta fenomenal sátira. En verdad recomiendo se den el tiempo para verla, la pueden encontrar en YouTube bajo el nombre del título de esta columna, “Calzonzin Inspector”
Para todos aquellos que piensen que ahora este loco que suscribe el presente escrito ya quiere entrarle a ser crítico de películas, no se preocupen ya que no será así más bien intento hacer énfasis en una triste realidad que aún se vive en nuestro país. Pareciera a veces de no creerse, que después de tantos gobiernos (de los tres órdenes) que han demostrado ser todo menos eficientes, transparentes, con conciencia y empatía social, seguimos viendo casos infames del cómo no se tendría que gobernar, Duartes, Padrés, “Layin”, etc. pero que siguen brotando cual borbollón de un manantial maléfico. Lo peor es que la culpa la tiene la sociedad que increíblemente sigue o votando para que ganen o que simplemente no ejercen su derecho de sufragar y permiten que los sistemas así, sigan existiendo.
¿Cuántos San Garabatos seguimos teniendo, cuantos Don Perpetuos pululan muchas alcaldías, gubernaturas y más, cuando abriremos nuestros ojos como sociedad, cuando pasaremos de ser material para crudas sátiras a ejemplos sociales colectivos inspiracionales? ¿Cuándo, en verdad cuándo?
Nota importante
Si piensan que mi postura es de tendencia negativa o solo escribo por criticar, en verdad los invito a ver esta película que fue hecha hace 43 años y verán que entre risas inevitables, su mente los trasladará a nuestros días y que aquellas escenas chuscas las podemos comparar con muchas de las que actualmente vivimos. Y si en verdad tienen conciencia y dignidad, la risa se irá diluyendo al ver nuestra triste e infame realidad.
Jorge Alonso Infante Alarcón
Carrera Licenciado en Relaciones Internacionales.
Maestría en Administración Pública en la U.A.M. Francisco Hernández García (U.A.T.)
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