En esta semana que está por concluir, la alcaldesa de Reynosa, Maki Ortiz Domínguez continuó su campaña, como si ella fuera a reelegirse como Presidenta Municipal en la elección del 2018. Eso no va a pasar. Maki ha sido un lastre para el Partido Acción Nacional por su testarudez, por su necedad, y por esa manía que demostró desde el instante que se instaló como Alcaldesa de Reynosa, decepcionando a propios y extraños con su “sui generis” forma de “gobernar” por decir lo menos. Maki se ha peleado con muchos personajes de la política estatal y municipal, sumando el hartazgo de Margarita Zavala de Calderón ante sus cotidianas quejas telefónicas por todo y contra todos. Y también ha corrido de la administración municipal a varios personajes abusando de que “por su enfermedad, se le perdona todo”.

En esta semana, Maki presidió un evento más de audiencia ciudadana en La Joya, en donde habló de un Reynosa que no conocemos. Hay quienes aseguran que se confundió con Mission porque todos quienes estuvimos presentes en esta Audiencia nos quedamos con cara de “What”.

Maki dijo que su gobierno triplicó las becas “y las incrementamos”. ¿Sí? ¿Enserio? Pues dieron becas de solo $350 pesos, cantidad que no alcanza ni para un par de zapatos. Ella, Maki, debe saber que está difícil estudiar con el estómago vacío.

Maki dijo que Reynosa es la mejor ciudad de este país. A lo mejor su corazón chihuahuense le dice que sí, pero la mejor ciudad bajo su gobierno me parece que no. Calles destrozadas, calles oscuras como boca de lobos, agentes de tránsito pillos, inseguridad, cobros al triple en el DIF municipal, cobros muy elevados por piso, incremento en los cobros de alcoholes, incremento en el cobro de permiso a los restaurantes de la ciudad. Bajo el Gobierno de Maki Reynosa se ha convertido no en la mejor ciudad pero si en la más costosa.

¿Y sólo una pregunta? ¿Si Reynosa es la mejor Ciudad del mundo, porque Maki y su familia viven en Mission, Texas? Eso me suena a contradicción. Y lo peor, no sé si la contradicción es políticamente planeada o sólo producto de su desequilibrio emocional.

Maki también dijo que “tendremos la inversión en obras más grandes de la historia”.  Y anunció que “pondremos pantallas para que todos puedan checar como avanzamos y en dónde”. ¿Estas pantallas serán como el sinónimo de la cajita de cristal en donde todos conoceríamos hasta el dato del cheque más insignificante que la administración pagaría?. Hasta hoy no ha habido cajita de cristal, el portal de transparencia del Ayuntamiento de Reynosa está incompleto, sin todas las particularidades activadas, en donde no conocemos la inversión en comunicación social, en donde faltan las cuentas públicas de 2016 y tantos y tantos datos que faltan para que la ciudadanía de verdad conozcamos como se está manejando el presupuesto, porque 200 mil pesos de compensación a los consentidos de la alcaldesa, como es el caso de Juan García Guerrero, no es un dato de transparencia, sino un dato de uso abusivo de los recursos públicos.

Siguiendo con el discurso, Maki hablo de Inversión histórica en drenaje, pero no dijo cuánto, en donde y de dónde; habló también de la regeneración de los cárcamos, proyecto que logró la anterior administración con recursos a fondo perdido del Banco de América del Norte; dice Maki que se va a arreglar las tuberías de la ciudad, sin especificar cuando, en donde y de dónde.

Al hablar del tiempo que van a tardar las obras, Maki asegura que los trabajos van a durar más de año y medio. ¿Y si no es candidata la chihuahuense, como no lo va a ser? ¿Y si quien llegue a la Presidencia Municipal el primero de octubre de 2018 no comparte su “Proyecto de Todos”? ¿Y quién nos garantiza a los ciudadanos que dichas obras habrán de realizase?

Y en lo que parece una inusual mitomanía política, Maki habla de la danza de los millones. Por ejemplo, asegura que su administración tiene 200 millones para cambiar la historia del drenaje en Reynosa; habla de los camiones nuevos de basura como si la compra fuera a ser por más de 100 unidades; habla Maki de que se van a rehabilitar muchas de las plazas y muchas de las escuelas de la Ciudad; asegura que vienen muchas pavimentaciones para calles de Reynosa. En resumen, Maki presume que Reynosa verá obras nunca antes vistas en esta ciudad.

Pero, ¿y de dónde sacará Maki los recursos? Parte del NadBank, parte del despido, dice ella, de más de mil aviadores que ahora ya no están en el Ayuntamiento de Reynosa. ¿Aviadores? ¿O la autoridad anterior tenían trabajadores fantasmas? Hay que recordad que por ese exceso, el ex tesorero Ahmed Kaddour Rodríguez ya fue inhabilitado por ese…. Mmmmm… ligero detalle. Y si ya hay las pruebas de estos “excesos”, porque Maki no denunció a José Elías Leal, a Kaddour o  a otros que se hayan visto involucrados en estos excesos? Si no lo hace Maki será cómplice por omisión.

Y oronda, muy oronda Maki presume que su administración ha reparado más de cuatro mil baches, ha reparado más de 4 mil luminarias, y como queriendo cubrirse el rostro antes de la pedrada, asegura que esas grandes reparaciones “no se notan”. “Así de grave estaba el problema” dice Maki. ¿Por qué Maki no se limita a ordenar a su personal que publique en los medios de comunicación la lista y ubicación de esos trabajos? Obvio. Porque las reparaciones no alcanzan ese número y los pocos que ha reparado lo ha hecho con arena.

Asimismo, la Ciudad no solo se encuentra mal si no también está apestosa, con aguas negras por muchos sectores de la ciudad, que son verdaderos focos de infección, sobre todo para los niños y los adultos mayores. Ese problema se comprometió a resolverlo de inmediato y, reitero, la ciudad cada día va de mal en peor.

Maki tampoco se ha distinguido a lo largo de estos meses por su buen corazón ni humanidad. Por las calles de la ciudad pululan personas que debieran estar en un centro de atención psiquiátrica y que debido a la negativa de no querer pagar una pequeña nómina, los pone en riesgo a ellos y a los ciudadanos, lo que a Maki le importa un rábano.

Maki prefirió sacrificar al Hospital Psiquiátrico y doblar la renta que el Ayuntamiento paga a su cuñada por el edificio que alberga a la Delegación de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Asimismo, prefirió cerrar el Hospital psiquiátrico de Reynosa, que dejar de pagar los millones de pesos que se gasta el Ayuntamiento de Reynosa por concepto de compensaciones para sus amadísimos muchachos: el alcaldito, Hugo Ramírez Treviño; su esposa Cristina Zapata, quien cobraba cien mil pesos de compensación en la COMAPA y el ex encargado de la gerencia de la misma COMAPA, Juan García Guerrero, papá de su suplente en el Senado de la República, quien cobraba 200 mil pesos al mes.

Por cierto, un pajarito nos dice que el Hospital Psiquiátrico estará en operación el próximo mes de julio, gracias a la generosidad de alguien que si entiende de estos temas, aún y contra los mezquinos deseos de la alcaldesa de Reynosa. Después le platico los detalles de esta circunstancia que podrá más que contento al Dr. Amadeo de León, Director de este centro psiquiátrico.

Dice doña Maki, después de nueve meses de ejercer el presupuesto, que todos los servicios públicos tienen problemas por lo que pide paciencia a la ciudadanía. Si así se los dejó José Elías Leal, después de nueve meses ya no es responsabilidad de él. Ella debió haber llegado con todo y denunciar a Elías Leal por las condiciones en que le entrego el Ayuntamiento, cosa que no hizo y ella se ha reservado el decir porque se comió las denuncias. Maki asegura que toda la información la va a poner en un tablero. Insisto, la cajita de cristal de siempre, pero lamentablemente, Maki no ha pasado de las palabras a los hechos. Hablar bonito y no cumplir se llama mentir. Y sí, la alcaldesa de Reynosa, tiene esa singularidad y apasionamiento por las mentiras. Y mentir, según el Diccionario de la Real Academia, tiene tres acepciones: 1. Decir deliberadamente lo contrario de lo que se sabe, se cree o se piensa que es verdad con el fin de engañar a alguien; 2. Conducir [una cosa] al error o a un razonamiento falso; y 3. Tendencia o inclinación patológica a fabular o transformar la realidad al explicar o narrar un hecho. ¿Cuál será el motivo o la razón por el cual Maki miente a la sociedad reynosense? Una posibilidad es que la propia Maki debe saberlo, y a lo mejor ni ella lo sabe, lo que sería mucho más preocupante.

Dice Maki que somos una ciudad que hemos vivido momentos muy difíciles y esos momentos nos hacen ser la mejor ciudad del país con la mejor gente, porque no es fácil que después de una noche difícil, la gente se levante a trabajar para sacar a sus hijos adelante y eso nos hace especiales. En eso coincidimos. En lo que no puedo estar de acuerdo es en que todos somos Reynosa, hayamos nacido aquí o hayamos venido aquí, cuando ella ni nació en Reynosa, no vive en Reynosa y, por sus acciones queda claro que no le interesa ni la ciudad ni su gente. Por lo tanto, ella, Maki, no puede ser Reynosa.

Dice Maki que “tenemos que ser tolerantes”. Y la pregunta obligada es ¿Maki es tolerante? Y la respuesta es no. No es tolerante con su equipo, no es tolerante con sus compañeros de cabildo, no es tolerante con los medios de comunicación y no es tolerante con la ciudadanía que le pide hechos, resultados y acción. Y la muestra es que se le ha invitado a la cabina de Radio Rey y hasta hoy, e lo largo de nueve meses, no ha tenido espacio en su agenda para platicar con los reynosenses a través del 810 AM.

Estoy convencida de que si el gobierno se comporta bien, con transparencia y utiliza bien el dinero, sé que vamos a lograr sacar adelante a la Ciudad, dice Maki. Si en nueve meses no se ha visto esta actitud, se ve difícil y lejano que en lo que resta de la administración logre dichos resultados.

También, la chihuahuense, que “me voy a esforzar para que los baches vayan terminando, para tener una ciudad iluminada y que haya parques que sean verdaderamente rehabilitados”. Tampoco no se ve este escenario en el horizonte. Se ve lejos, lejos y muy lejos.

Dice la alcaldesa que “ya estamos hartos de cómo hemos vivido todo este tiempo”. Pues no parece. En su efímera administración no ha hecho nada para cambiar el rumbo de Reynosa: la ciudad está sucia, con baches, a oscuras, sin proyectos de valores, sin involucrar a la sociedad… No sólo ha cambiado en nada Reynosa, en los últimos meses, sino que ha empeorado en algunos rubros.

Finalmente, la mentira de mentiras de Maki, fue cuando pidió a la gente que “exijan cuentas claras en la presidencia. Eso es justo”. Si Maki no cumple con tener el portal de transparencia del Ayuntamiento a lo que está obligada por Ley, ya quiero ver que vayamos los ciudadanos a pedir información del uso que se hace de los dineros públicos a la Presidencia Municipal de Reynosa. Este gobierno municipal es una triste simulación. Maki sabe mentir y lo hace muy bien. Pero de ahí a cumplir a los ciudadanos, ni ella ni su equipo, ni sus trabajadores, ni nadie. A Maki lo que menos le interesa es Reynosa y sus ciudadanos. Si fuera tolerante y amorosa como se jacta, su comportamiento sería diametralmente diferente. A Maki le interesa el poder por el poder y los accesorios. Ella no ganó por ella ni la senaduría ni la alcaldía. Ella le debe esos triunfos a terceras personas. Pero lo más triste, es que Maki, ni siquiera, sabe ser agradecida. Lo bueno es que faltan sólo 15 meses para que esta nefasta administración termine, en el peor de los escenarios.

1. 1. ¿Cómo está eso de que se robaron la foto del ex alcalde José Elías Leal de la Galería de los Presidentes, en el Salón de Cabildos del Ayuntamiento de Reynosa? ¿Habrá sido Danaé Reyna, quien regresó por lo que es suyo? Conste que esta es sólo una de las posibles líneas de investigación.

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