Tampico, Tamaulipas.- Las alcaldesas de Tampico y Altamira, Magdalena Peraza Guerra y Alma Laura Amparán Cruz respectivamente, reprobaron el paro del transporte público en la zona, porque afectó a miles de usuarios ajenos a las demandas de los choferes.

Advirtieron que el Gobierno del Estado debe sancionar a los operadores que hicieron la protesta, para tratar de negociar un supuesto aumento a la tarifa del pasaje.

Peraza Guerra señaló que la protesta sólo vino afectar a los usuarios que buscaban llegar a las escuelas o a sus trabajos, debido a que el paro empezó desde temprano.

Dijo que además como no hubo transporte en algunas rutas, los taxistas estuvieron cobrando entre 120 y 150 pesos en "carreras", a lugares donde normalmente se cobran 50, lo cual también reprobó por no ser ellos conscientes de la situación.

Señaló que la administración municipal puso al servicio de la comunidad cuatro autobuses que posee, para llevar a escolares y gente a los trabajos, pero reconoció que no se pudo dar abasto ante la enorme demanda.

Por su lado, su homóloga de Altamira, Alma Laura Amparán Cruz, también puso de manifiesto que hubo miles de altamirenses como ocurrió con tampiqueños, que no pudieron llegar a sus centros de trabajo debido al paro del transporte.

Pidió a los operadores del transporte público que diriman de otra manera sus peticiones al Gobierno del Estado, pues con esta actitud afectaron a los usuarios, quienes llegaron tarde a las escuelas y a sus empleos.