Nuevo Laredo, Tamaulipas (Primera Parte).- En prácticamente tres años Nuevo Laredo, Tamaulipas sufrió una transformación significativa, tanto en infraestructura urbana, seguridad y empleo, convirtiéndose en la ciudad del cambio, esto fue la visión de un alcalde, Carlos Canturosas Villarreal, que desde el inicio de su administración buscó eso precisamente, el cambio para Nuevo Laredo.

En entrevista exclusiva para HOYTamaulipas, Canturosas habla de lo que fue su administración, de sus logros y de qué espera para su futuro próximo, cuando el primero de octubre entregue la estafeta a Enrique Rivas, quien como él surgió del Partido Acción Nacional.

Teniendo como marco la sala del cabildo, Carlos Canturosas hace un repaso de lo que fue su gestión al frente de la alcaldía de Nuevo Laredo, expresando su beneplácito por los logros realizados que se basaron en seis ejes rectores, que versaban en la aplicación de políticas públicas claras, seguridad, generación de empleos, servicios de calidad y el desarrollo social y humano.

Expresa Canturosas al hacer un balance de su gestión.

“Yo creo que la ciudad ha cambiado en materia de obra pública, ha cambiado en la forma de hacer política, ha cambiado también en cuanto al manejo de las finanzas públicas, ha cambiado también en todos los ámbitos de la administración municipal”, expresa Canturosas al hacer un balance de su gestión.

Y añade, “lo vemos con el refrendo y la confianza que le dio la población de Nuevo Laredo al nuevo gobierno que está por iniciar también el primero de octubre que parte de su lema de campaña fue que el cambio continúe, porque esta es la ciudad del cambio, la gente quiso que continuara el cambio y si la gente quiso que continuara el cambio independientemente de la opinión que yo pueda tener que debe de ser importante, pues la opinión de la población abrumadoramente la gente votó por la continuidad de un ejercicio de gobierno muy similar al que esta seguramente será”.

En el balance que hace de estos casi tres años señaló que la obra pública fue una insignia en su gobierno, donde se invirtieron año con año más de mil millones de pesos, se realizaron 20 ejes viales, se pavimentaron más de mil 100 calles, la mayoría con concreto hidráulico, se hicieron más de 60 parques y jardines, espacios culturales, deportivos y se instalaron 12 mil lámparas led, además de la construcción de una nueva planta potabilizadora de agua, entre otras obras.

Para Carlos Canturosas una de las obras principales fue la construcción de las dos escuelas preparatorias públicas municipales, únicas en su estilo en todo Tamaulipas, las cuales son administradas y subsidiadas totalmente por el ayuntamiento que da albergue a más de 3 mil 500 alumnos con una planta de maestros superior a los 150 docentes.

“De cada ciclo escolar aquí en la ciudad de secundaria egresaban entre cinco mil y seis mil alumnos y solamente lograban ingresar 2 mil 500 a tres mil alumnos, ¿dónde se quedaban los demás muchachos?, si no eres estudiante, si no eres trabajador, te conviertes en delincuente, te subes a un carro, te subes al convoy, agarras un fusil y andas de halcón, afortunadamente el gobierno del cambio entendió la gravedad del momento, entendió el compromiso histórico que toco vivir porque la gente voto por la alternancia precisamente para eso para que le diéramos soluciones rápidas y concretas”, explica.

Para un gobierno de alternancia no hay pretextos

Recuerda Carlos Canturosas que el llegar a la presidencia municipal de Nuevo Laredo no fue un camino fácil, enfrentarse a un sistema que tenía arraigado muchos años, siendo opositor y con una guerra sucia en su contra, y prometiendo el cambio que tenía que cumplir.

“A un gobierno de alternancia no se les permiten pretextos, un me equivoqué, un desvío, la gente te juzga creo yo  y aquí lo he vivido en carne propia con mayor severidad que a nadie, pues 'oye yo vote por ti porque me prometiste un cambio Canturosas', no lo vas a ser, de que se trata”, sentencia.

Señala que siempre se añoró tener esta responsabilidad y se criticó cuando las cosas no se hacían bien, por eso ahora al tener estar oportunidad histórica el compromiso del trabajo fue mayor.

El escuchar a la gente y estar conscientes de la responsabilidad que conlleva ser el alcalde de una ciudad como Nuevo Laredo no era nada fácil, expresa Carlos Canturosas.

Y reflexiona sobre cómo los políticos pierden el piso cuando viven encapsulados en un círculo de elogios mutuos, “nada de eso hay que estar siempre receptivo no, obviamente hemos cometido errores, hemos tratado de enmendarlos y hemos tratado siempre de tener la mayor satisfacción frente a la población”.

Tres años son pocos para remediar todos los males y los problemas de Nuevo Laredo, sentencia Canturosas, pero se avanzó y suficiente, tanto en obra pública como en hacer crecer la economía de la ciudad.

“Si estoy contento, satisfecho pues quiero hacer más, me quedé con ganas de hacer más cosas, de pavimentar mas calles, de tapar mas baches, de mejorar todavía mucho mas o mejor la seguridad pública, esa satisfacción creo que es bueno incluso que nunca me llegue porque siempre voy a tender a estar mejorando y ser mejor”, expresa.