Tampico, Tamaulipas.- El alimentar a los cocodrilos de la Laguna del Carpintero es un diario desafío a la muerte para Don Ignacio Bautista “Don Nacho Man”, como lo dice el rap que se escucha al fondo en una pequeña bocina, los saurios no son un peligro, por el contrario “les enseño como convivir con las personas”.

Son las 4:00 de la tarde y en el mirador de la Laguna del Carpintero en Tampico comienzan a observarse los reptiles, a decir de Don Nacho “es que ya conocen la rolita que me hicieron, el rap del alimentador de cocodrilos ya saben que llegue”.

"Don Nacho Man" explicó que comenzó hace 11 años a alimentar a los saurios con pollo crudo, desde entonces “ya me conocen, no me hacen nada, me les acercó, los alimento, les aplaudo y acaricio”.

“Ellos no atacan, por el contrario les he enseñado a convivir con los humanos, son dóciles siempre y cuando nadie intente atacarlos, puedo estar con ellos sin que me hagan daño, ellos no hacen nada”, citó.

En la Laguna del Carpintero hay un sinnúmero de cocodrilos, desde recién nacidos hasta de cuatro metros de largo, los cuales son admirados por turistas que llegan desde Estados Unidos, Colombia, Cuba, Argentina, Distrito Federal, Nuevo León, Querétaro y otras partes de México.

Don Nacho, vive a tres manzanas del centro turístico y es jubilado, ha sido apoyado por autoridades locales, sin embargo, consideró que hace falta un poco más de mantenimiento al mirador de cocodrilos.

Ante ello, pidió al próximo Gobierno local que volteé a ver este lugar de recreación, que sigue atrayendo turismo a la zona, pero sobre todo genera movimiento económico a la urbe porteña.