Matamoros, Tamaulipas.- “A nadie conviene competencias ni rivalidades, siempre hay esperanza de tiempos mejores”, dijo el administrador Diocesano, Roberto Sifuentes Aranda al referirse al cambio de Gobierno que ya se aproxima.

Manifestó que siempre que hay un cambio político, las personas no dejan de tener la esperanza de que estos cambios sean importantes para que se beneficien las familias.

Señaló que todo cambio es bueno, sobre todo si se trata de pensar que hay nuevas oportunidades y esperanza de más fuentes de trabajo.

Sin embargo, reconoció que en determinado momento pudiera haber complicaciones, sobre todo si se toma en cuenta que un Gobierno, como el del Estado, pertenece a un partido político diferente al que estará en la ciudad.

“Por eso es necesario que se pongan de acuerdo, que eviten las rivalidades que solo provocarían que hubiera atraso en la ciudad, sobre todo en el desarrollo de las ciudades”, apuntó.

Por otro lado, el administrador de la Diócesis de Matamoros, destacó que uno de los principales retos a enfrentar de las próximas autoridades en Tamaulipas y Matamoros es el rubro de la inseguridad, una situación que lastima a la sociedad y que cada día se complica.

Finalmente dijo que ellos se dan cuenta de esta situación porque cada vez acuden más personas a las Iglesias para pedir a Dios fortaleza y protección para ellos y sus familias, “hay quienes incluso piden el consejo de los sacerdotes”.

vmp