En virtud de que una parte de su territorio está incluido en la Reserva de El Cielo, considerando que sus nogales no tienen parangón en la región, que su gastronomía destaca como una de las mejores de Tamaulipas, porque tiene una ciudadanía altamente politizada que ha derrotado en varias ocasiones a los partidos tradicionales, por destacarse en la geografía nacional con hombres y mujeres que han figurado en diferentes actividades como el agrarismo y la educación pero, sobre todo, por la hospitalidad y calidez de su gente, creo que Jaumave también debe ser considerado como uno de los pueblos mágicos de la entidad.

Lo anterior lo expresé ante profesores y estudiantes de la Normal Alberto Carrera Torres y de la Universidad del Mar ante quienes hablé de periodismo, literatura y de todo lo que se me dio la gana invitado el viernes por el Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes (ITCA) pues el gobierno del estado con los ayuntamientos organizó el llamado Festival del Altiplano y todo el fin de semana hubo conciertos, presentaciones de libros, danza y otras actividades tocándome participar en sendas charlas que incluyeron introducción musical con el saxofón de Alan René y la Guitarra de Jesse Rosales, además, firmé decenas de ejemplares del libro de cuentos Padre por un día (de mi modesta autoría).

La primera charla tuvo lugar en el auditorio de la normal cuyas instalaciones se encuentran en muy buenas condiciones y en la entrada sobresalen las figuras del colonizador José de Escandón y Helguera y del revolucionario tamaulipeco Alberto Carrera Torres que le dan un aspecto de solidez identitaria al plantel cuyos profesores y alumnos se muestran orgullosos de su pueblo y generosos con quienes los visitan pues aplaudieron con mucho entusiasmo cuando comenté que Jaumave tiene suficientes méritos para ser pueblo mágico.

En el edificio del CBTIS local funciona la Universidad del Mar donde me sorprendió la actitud crítica y participativa de profesores y estudiantes quienes hicieron algunas preguntas acerca de temas literarios y periodísticos, además, hubo quien pronunció palabras de aliento a mi trabajo literario lo cual me motivó a decirles que regresaré cuando sea necesario ya que el viaje de fin de semana a Jaumave me permitió reencontrarme con el doctor Antonio (mi excompañero de la maestría en Docencia), conocer a la licenciada Felipa (egresada de la UAM de Ciencias, Educación y Humanidades) y recibir el saludo amistoso de directivos, maestros y alumnos.

Fue un día de trabajo muy placentero estimulado por la compañía de mi agente literaria (la maestra Clara García), la coordinadora de Salas de Lectura del ITCA (maestra Mary Trujillo) y con la participación de dos excelentes músicos que, aparte de amenizar las sesiones de fomento a la lectura, conectaron con catedráticos y estudiantes que se motivaron en ambos planteles para echarse unos “palomazos” demostrando su talento para cantar dejando un buen sabor de boca en todos los presentes y confirmando la magia que posee Jaumave.

Por otra parte, con la representación del Rector de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), Enrique Etienne Pérez del Río, la Directora de Difusión Cultural, Juana Adela Tamez Haces, encabezó recientemente la ceremonia de premiación del concurso literario Juan José Amador en el que participaron decenas de jóvenes de distintos municipios de la entidad; en presencia de numeroso público y en el marco de la Feria Universitaria del Libro, en el Paseo Pedro José Méndez de esta capital, agradeció a los jóvenes que participaron y felicitó a los triunfadores de este año exhortándolos a inscribirse en el Taller de Creación Literaria que auspicia la UAT y que coordina el reconocido escritor tamaulipeco Alfredo Marko.

Los estudiantes Francisco Javier Guadalupe Cantú e Itzia Delgado Báez, alumnos de la Benemérita Normal Federalizada de Tamaulipas y de la Normal de Educadoras Estefanía Castañeda, respectivamente, recibieron su diploma como triunfadores del certamen con el cuento “Mamá” y el poema titulado Ciudad sin Dios, además, recibirán un merecido estímulo económico por parte de la máxima casa de cultura de la entidad; el jurado calificador, integrado por profesores universitarios con una sólida carrera literaria, expresó comentarios sobre el ganador de cuento diciendo que hizo un buen tratamiento del tema y encomió el buen uso de los recursos narrativos; sobre la triunfadora de poesía se dijo que es una autora consistente, tiene buen lenguaje y se le augura futuro en el oficio poético.

El jurado emitió también dos menciones honoríficas: para Abraham Hernández Juárez por su cuento “El capitán Caronte” y para José Roberto López Martínez por su poema titulado “No le mientas a las nubes”; luego de la premiación el público disfrutó de la actuación del grupo Son de la UAT; los organizadores de la edición número 16 de la FUL informaron que durante diez días los victorenses pudieron adquirir numerosos libros a precios muy razonables y disfrutar del talento de los jóvenes artistas universitarios que se presentaron durante las tardes, además, hubo lectura en voz alta y presentaciones de libros con el respaldo del ITCA y la Secretaría de Cultura del gobierno federal.

Correo: amlogtz@prodigy.net.mx

Ambrocio López Gutiérrez

Periodista y Sociólogo.
Columnista en diversos medios  electrónicos e impresos.
Redactor en el equipo de Prensa de la UAT.
Profesor de horario libre en la UAM de  Ciencias, Educación y Humanidades.