Derecho a ser feliz

El connotado filósofo español José Ortega y Gasset sostiene que el hombre tiene derechos universales espirituales, sicológicos y bilógicos, y que la satisfacción de los mismos se resume en felicidad, paz y prosperidad.
 
La Universidad de Columbia, a través del Earth Institute, determina el índice mundial de felicidad a través del análisis de factores como la riqueza nacional y per cápita, la libertad política, la ausencia de corrupción y la fortaleza de los vínculos sociales, así como la salud mental, factor determinante en la consolidación de la felicidad.
 
La felicidad tiene lugar cuando en el cerebro se activan varias regiones y se estimula la producción de endorfinas y otras sustancias como la serotonina y dopamina… de ahí que un poco de chocolate llegue a provocar algo muy parecido a la felicidad, aunque sea artificialmente. Sin embargo, la felicidad real sí es alcanzable, en tanto los individuos utilicen las fortalezas emocionales personales en las esferas más importantes de su vida.
 
Con México ocupando el lugar 61, y Bután, un pequeño país oriental de mayoría budista en el primer sitio, queda claro que las medidas tomadas por esta nación consistentes en anteponer el índice de Felicidad Interior Bruta (FIB) como modelo de desarrollo del país son mejor idea que priorizar el Producto Interior Bruto (PIB) como indicador de bienestar.
 
Propiciar y alentar la riqueza de la felicidad de los habitantes de su país, en vez de las posesiones materiales, la producción de bienes, servicios o la materia prima, fue logrado por gobierno y ciudadanos de Bután al promocionar un desarrollo socioeconómico sostenible e igualitario, preservando y promocionando sus valores culturales, conservando el medio ambiente y estableciendo un gobierno bueno y plural.
 
No resulta de extrañar que no bien permitieron la entrada de internet y la televisión extranjera a Bután en apenas 1999, el contacto con la cultura occidental provocase funestas consecuencias, particularmente entre los jóvenes, con conductas como consumo de drogas, infravaloración por el trabajo y pérdida de respeto hacia otros valores sociales y de la comunidad.
 
La felicidad es posible aún en medio de las vicisitudes que nos rodean; una buena actitud y procurar el optimismo es esencial, así como mantenernos activos, pero sobre todo, es más sencillo alcanzara si nos ocupamos de servir a los demás y de cuidar nuestro entorno a través de acciones responsables y positivas.
 
Ser feliz es un derecho y es una elección… al menos, eso digo yo.
 
LA CAJONERA…
1.- LA FRASE: “Lo importante en esta vida es ser y hacer: jamás tener”. Lorena Illoldi.
2.- UN TROZO DE POESÍA: “Esta vez dejadme/ ser feliz,/ nada ha pasado a nadie,/ no estoy en parte alguna,/ sucede solamente/ que soy feliz/ por los cuatro costados/ del corazón, andando,/ durmiendo o escribiendo./ Qué voy a hacerle, soy/ feliz”. Pablo Neruda
 
3.- MISCELÁNEOS: Justo en el aniversario número 82 de la caída del franquismo, miles de ibéricos desfilaron por las calles de Madrid para pedir la instauración de la III República y la destitución de una muy vapuleada monarquía, que no da pie con bola en medio de escándalos de corrupción, una tremenda crisis económica y altísimos índices de desempleo, hechos que mantienen a muchos españoles más que molestos con sus monarcas, a quienes ven protagonizar penosos hechos cada vez con mayor frecuencia. Habrá que esperar a ver en qué dirección se mueve la rancia nobleza, para saber si consiguen sobrevivir a esta crisis y encuentran el modo de perpetuar a la “realeza” en pleno siglo XXI.