Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El Coordinador del Instituto de Investigaciones Parlamentarias del Congreso del Estado, el Dr. Eddy Izaguirre impartió la conferencia “El Nuevo Orden Constitucional” dentro de las 5º Jornadas Nacionales de Investigación y Posgrado en Ciencias Sociales.
El Auditorio de la Unidad Académica de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Tamaulipas fue la sede de la conferencia con la que se inauguraron estas jornadas, cuyo propósito es fomentar la investigación en las ciencias sociales por parte de catedráticos y alumnos de los posgrados de la institución.
Señaló que el país tiene un nuevo orden constitucional a raíz de las múltiples reformas que ha tenido la carta magna en los últimos años. Destacó que la constitución es la ley principal de un país, son las leyes que rigen la convivencia social de una nación.
Aunque las primeras expresiones de lo que sería una constitución surgieron en Grecia y Roma fue hasta la edad media, en el año de 1215 cuando un grupo de nobles obligó al monarca inglés a firmar un documento que restringía su poder, el cual se conoce como “La Carta Magna”.
De manera formal la primera constitución como tal es la de Estados Unidos en 1787, aunque algunos consideran que podría ser la declaración de derechos de Virginia unos años antes.
Indicó que a pesar de ser la constitución más antigua sólo tiene 7 artículos y varias enmiendas, donde se establece la separación de poderes (ejecutivo, legislativo y judicial), los pesos y contrapesos y una carta derechos. Se destaca por contener obras como “El Federalista”.
MÉXICO Y SUS CONSTITUCIONES
En el caso de México, el Dr. Izaguirre resaltó la frase de Jorge Carpizo que se refiere a que toda constitución es consecuencia de un movimiento social como una independencia o revolución, cómo ha sucedido en el caso de México.
Explicó que la primera constitución nacional fue la de 1824, en donde los legisladores se basaron en la constitución de Estados Unidos para hacer la carta magna del país, aunque también tomaron aspectos muy importantes de la Constitución de Cádiz de 1812.
Externó que esta constitución no tienen ningún capítulo sobre los derechos humanos y que su legado es haber sentado las bases del poder público en el país.
La Constitución de 1857 tenía 128 artículos fue el resultado del Plan de Ayutla y derrocamiento de Santa Anna. Su legado principal son los derechos políticos, resalta que la soberanía recae en el pueblo, surgen las dos cámaras en el Congreso de la Unión y nace el juicio de amparo.
Indicó que finalmente llegó la Constitución de 1917 como resultado de la Revolución Mexicana, la cual contiene 136 artículos, siendo su principal legado los derechos sociales que regulan los derechos de los obreros y los campesinos, por lo que es reconocida por otras países como un ejemplo a seguir.
A casi un par de año de que se cumpla el centenario de esta constitución dijo que es normal que se suscite un debate sobre si se requiere una nueva constitución o no. Sin embargo aseguró que las reformas de los últimos años, llamadas por esta administración federal como estructurales, han cambiado gran parte de la carta magna, manteniendo solamente 28 artículos originales.
Explicó que las nuevas reformas en trasparencia, en juicios orales o en juicio de amparo marca un antes y una después, lo mismo en materia política con el Pacto por México, o la reforma educativa que es más bien una reforma laboral en ese sector, la de telecomunicaciones, la energética o la electoral.
El Dr. Izaguirre expresó que le preocupa la cultura de la legalidad en nuestro país, ya que es muy pobre. Como ejemplo compartió los resultados de distintas encuestas, una de ellas que hizo el IFE con el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.
Entre los resultados que arrojó esta investigación se destaca que el 90% de los mexicanos desconocen la constitución, el 87.4% no creen en la constitución y el 95% tienen desconfianza del prójimo, de los ciudadanos.
Además entre los peores evaluados por parte de la ciudadanía se encuentran en primer lugar las policías, seguido por los gobiernos municipales, los legisladores y los partidos políticos, por lo que si se quiere hacer una nueva constitución son precisamente estos últimos los responsables de hacerlo y son los que menos credibilidad tienen.
Pidió aprovechar el centenario de la constitución, como una oportunidad coyuntural e histórica para hacer una serie de actividades y dar a conocer a la gran mayoría de los mexicanos la constitución, ya que es este el documento legal en cómo se rige la vida de los mexicanos.
